Para esta primavera 2010, la diseñadora Luella Bartley logró inundar las pasarelas de un aire romántico, chic y súper childish. Con prendas de cortes ultrafemeninos y líneas sencillas, acompañados de detalles que resaltaban la belleza e inocencia, las modelos lucieron las creaciones de esta talentosa artista de la moda. Definitivamente los adornos en el cabello en forma de moño, así como las bolsas, y el polka dot evocando un aire completamente retro, fueron lo mejor.